Omega- 3 para la depresión ¿Cuánto hay que tomar?
La obsesión por la delgadez durante las últimas tres décadas nos ha llevado a despreciar todas las grasas en la dieta, incluyendo los beneficiosos ácidos grasos omega-3 como el EPA y el DHA. El resultado ha sido una ola de depresión, déficit de atención (TDAH) y otras aflicciones psicológicos (1) (2). La incidencia de la depresión ha ido subiendo cada década del siglo XX, al igual que los costes de salud para los medicamentos antidepresivos y de la salud mental. (3)
En América del Norte hoy en día, la ingesta media diaria de EPA más DHA es sólo de 130 mg, muy por debajo del 1000-2000 mg total de ácidos grasos omega-3 diarios que es lo recomendado por algunos médicos para una salud óptima, un buen estado de ánimo y buena función cognitiva. Basado en los ensayos clínicos, las dosis de 1000-4000 mg pueden ofrecer beneficios máximos para las personas con depresión. (4)
"Aunque el mecanismo de acción preciso es todavía desconocido, la evidencia sugiere que la acumulación de 1000-2000 mg diarios de EPA pueden ser útiles en el tratamiento de la depresión leve a moderada", comenta el Dr. Yamina Osher (miembro de la Facultad de Ciencias de la Salud en la Universidad Ben Gurion en Beer Sheva, Israel), autor principal de un estudio reciente de 12 ensayos clínicos de PUFAs en la depresión, trastorno bipolar y estado de ánimo (5)
Fuentes (extracto de la revista Life Extensión para Marzo 2012)
1. Bruinsma KA, Taren DL. Dieting, essential fatty acid intake, and depression. Nutr Rev. 2000 Apr;58(4):98-108.
2. Wells AS, Read NW, Laugharne JD, Ahluwalia NS. Alterations in mood after changing to a low-fat diet. Br J Nutr. 1998 Jan;79(1):23-30.
3. Weissman MM, Klerman GL. Depression: current understanding and changing trends. Annu Rev Public Health.1992;13:319-39.
4. Logan AC. Omega-3 fatty acids and major depression: a primer for the mental health professional. Lipids Health Dis. 2004 Nov 9;325.
5. Osher Y, Belmaker RH, Nemets B. Clinical trials of PUFAs in depression: State of the art. World J Biol Psychiatry. 2006;7(4):223-30.
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